BROMA OAXAQUEÑA
Algo de lo cotidiano en la ciudad de Oaxaca es ir a caminar, o simplemente a descansar en el Paseo Juárez que antes se conoció como El Llano. Ahí en las cuatro esquinas de ese espacio se pueden observar unos majestuosos leones dorados, que en diferentes épocas han estado descuidados o han sido semidestruidos, pero no han faltado las autoridades municipales que los han mandado a restaurar para que recuperen su majestuosa presencia.
Es común entre los oaxaqueños bromear a los niños o a los turistas, pidiéndoles que adivinen de que son esos leones, y estos comienzan a adivinar en cuanto a materiales: bronce, piedra, fierro, cemento, yeso, madera, etc.
… el interlocutor sonríe y da la respuesta: son de mentiritas, y todo mundo lanza una carcajada por la broma.
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