El Zumbido de Moscardón
Francisco Alejandro Leyva Aguilar
Ayer hablé de la apatía de los Mexicanos por los asuntos de relevancia política en nuestro país que tendrán trascendencia las próximas décadas y auguré resultados funestos para las nuevas generaciones que no gozarán de los mismas libertades que tenemos hasta hoy.
Los que sí están muy preocupados no por enderezar al país, sino por no perder privilegios, son los cárteles de la droga. La guerra intestina de quienes fueran cómplices y formaran el cartel más grande y sanguinario que jamás haya existido, hoy pelean un lugar en el narco estado propuesto con “abrazos, no balazos”, el peje López Obrador, por cierto ¿alguien sabe algo de él?, porque si presumía su popularidad ¿por qué no sale a alguna fonda a comerse unos tamales de chipilín?, digo el pueblo lo ama o ¿no?
Como dije en el párrafo anterior, el cartel más poderoso de México, el de Sinaloa, se dividió y hoy sus dos facciones (la mayiza y los chapitos), se pelean por venganza primero -se supone que uno de los hijos del Chapo Guzmán entregó a los Estados Unidos al Mayo Zambada- y por el control del negocio después.
Pero a los sicarios y los traficantes de droga, ya vimos que les hace falta política para poder resolver sus conflictos, entre ellos mismos y con el gobierno, por eso ha entrado en escena, según documentos filtrados por el grupo hacker Guacamaya, una tercera entidad en el entramado del narcotráfico.
Motivado quizá por los cientos de millones de dólares “invertidos” en Sinaloa, Tamaulipas, Michoacán, Sonora o Baja California el partido en el poder Morena, ha entrado al quite en la guerra entre “mayos” y “chapos” ¡y de qué manera!. Existe la presunción de que los morenos están proponiendo una triada para acabar con la violencia no solo en Sinaloa, sino en todo el país.
Esa triada estaría compuesta por una alianza entre los “chapos”, el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y como brazo político, el partido Morena con Luisa María Alcalde en su segundo papel de florero y con el júnior tóxico Andy López BELTRÁN (algunos dicen que emparentado con los BELTRÁN LEYVA), como orquestador y ejecutivo de las decisiones importantes en ese otro clan perverso.
De esta manera se acabaría el terrorismo en México, término terrible que el Secretario de Seguridad Federal, el otro júnior tóxico Omar García Harfuch, no quiere utilizar para no lastimar a su presidente (con E) a pesar del TERROR que han causado coches bomba, alcaldes desmembrados, cabezas cercenadas y tantas atrocidades que estamos viendo en este México de la “transformación”.
El júnior tóxico Omar García Harfuch desde el Estado, no va a poder con la inseguridad en México, ni aunque cuente con el apoyo de fuerza del ejército y la marina armada de México simplemente por colusión, en cambio una alianza entre Morena-CJNG-Chapos, haría las veces de un gran cartel cuya fuerza y recursos, aplastarían a los demás, incluida la “mayiza”.
Un gran cartel de ese tamaño que tenga controladas aduanas, carreteras, puertos, aeropuertos, costas; que tenga asegurado el paso de la droga por todo el territorio, que no tenga que preocuparse por las extradiciones, que tenga su propia red de bancos del bienestar para lavar el dinero y que además le aporte una buena cantidad de dinero a los programas sociales del gobierno federal y a las campañas de los morenos, pacificaría al país.
Aunque hay un actor que no está conforme con eso y ese, está preso en Estados Unidos con una lengua muy larga y una cola que ya le cortaron. El Mayo Zambada tiene muchas cosas qué decir y ya nos dio una prueba con su carta donde nos informó en qué lugar mataron a Héctor Melesio Cuén Ojeda el principal opositor de Rubén Rocha Moya el narco gobernador de Sinaloa, una entidad en estado de sitio.
A unos días de la elección de Estados Unidos en cuya agenda de los candidatos está como prioridad México, sus carteles y sus migrantes, la moneda para el súper cartel aun está en el aire, pero lo que se sabe extraoficialmente, es que, así como la Reforma Judicial, la alianza perversa, nefasta y sanguinaria, va.
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