El Zumbido del Moscardón
Francisco Alejandro Leyva Aguilar
Y la bomba llegó. Siempre he creído que cuando los Estados Unidos, o algunos de sus funcionarios, quieren intervenir en la vida política de otros países, no lo hacen de manera directa y abierta, para eso tienen otros brazos políticos que son los que actúan con su consabida credibilidad internacional, los gringos ocupan a sus medios para entrometerse en la vida pública de otras naciones.
Así vimos a Propublic, el Washington Post o el New York Times, lanzar dardos envenenados al gobierno mexicano para afectar a la corcholata presidencial Claudia Sheinbaum Pardo. Hace unos días este último diario estadounidense publicó una investigación que le pega directamente a los vástagos del “presidente”.
La periodista mexicana exiliada Anabel Hernández, habría adelantado algo de estos testimonios en su más reciente libro titulado “la historia secreta de AMLO y el Cártel de Sinaloa” donde detalla incluso la relación de los hijos mayores del peje, con los señores de Badiraguato.
El New York Times (NYT), detalla que funcionarios de la Ley estadounidenses indagaron durante años afirmaciones de que aliados del “presidente” amlo, se habrían reunido con cárteles del narcotráfico y recibido millones de dólares luego de que asumió la Presidencia de México, de acuerdo a reportes que constan en los archivos de Estados Unidos.
De la misma manera, la nota señala que el gobierno mexicano ha sido fuertemente infiltrado por los carteles de la droga desde hace mucho tiempo, desde los niveles más bajos, hasta las altas esferas del gobierno. Sobornan a la policía, manipulan alcaldes, reclutan a altos funcionarios y dominan amplias zonas del país.
Dice NYT “los registros muestran que un informante le relató a los investigadores estadounidenses que unos de los confidentes más cercanos a López Obrador, se había reunido con Ismael Zambada García uno de los altos líderes del cartel de Sinaloa previo al triunfo de López en 2018.
Otra fuente le aseguró a los investigadores gringos que luego del triunfo de López en ese fatídico 2018, uno de los fundadores de los Zetas, este grupo criminal que ha causado terror en los lugares donde tienen presencia, pagó 4 millones de dólares a colaboradores cercanos de López Obrador para que lo sacaran de la cárcel, de ahí pudo haber nacido la actual ley de amnistía y de este manera el peje pueda cumplir con esos compromisos de liberar criminales.
Lo más grave, es que los investigadores consiguieron información de que los cárteles del narcotráfico en México, tendrían en su poder videos comprometedores e incriminatorios de los hijos del presidente Andy y Ramón, recibiendo dinero del narcotráfico. Algo parecido a lo que sucedió con el hijo de Gustavo Petro presidente de Colombia, con la diferencia de que el joven colombiano sí está en la cárcel.
Los agentes de la ley de Estados Unidos, también lograron rastrear pagos de dinero de personas que se creía eran operadores del cartel a intermediarios de López y, al menos uno de esos pagos, dijeron los investigadores, se efectuó más o menos al mismo tiempo que el peje se trasladó a Badiraguato en Sinaloa en marzo de 2020 y se reunió ahí con la mamá de Chapo Guzmán Loera.
Dice un refrán popular “lo que se ve no se juzga” y lo que los mexicanos vimos en ese marzo de 2020, fue a un presidente de la república, al más nefasto de todos, bajarse a rendirle pleitesía a la mamá de unos de los capos criminales más sangrientos que hayamos tenido en México.
En otras palabras, vimos al Estado Mexicano sojuzgado por el Crimen Organizado y eso no está a discusión, ni necesita una investigación federal en los Estados Unidos para determinarlo.
Por eso digo que los gringos tienen maneras muy sutiles de influir en la elección presidencial en México y no duden ni tantito que muy pronto esos videos de los que habla la investigación y en donde presuntamente los hijos del peje están recibiendo dineros calientes, van a salir a la luz pública, justo en el momento preciso del clímax de la elección.
El castillo de naipes donde está parada Claudia Sheinbaum, puede derrumbarse.
@leyvaguilar
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